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Nicolás Pineda Pablos

Y sin embargo 

Las crisis del agua en Hermosillo 

A propósito del día mundial del agua, les presento dos perspectivas de la crisis del agua en la ciudad de Hermosillo.

Los pozos en riesgo de secarse

Desde el punto de vista medioambiental, la ciudad de Hermosillo no está teniendo una relación sustentable con las cuencas que la rodean (su medio ambiente). De acuerdo con los registros de derechos de agua, la ciudad tiene un consumo o demanda total estimada en 220 millones de metros cúbicos (Mm3). Esta demanda incluye no solo el agua que utiliza la red del organismo de agua, sino también los pozos autoabastecidos de la industria y de algunos fraccionamientos.

Frente a esta demanda, en un año promedio la disponibilidad de agua es de alrededor de 262 Mm3. 

Bajo estas condiciones promedio, alrededor del 60 por ciento del agua se abastece de pozos (acuíferos o agua subterránea) y el 40 por ciento restante proviene de las presas Molinito y Novillo. Lo preocupante es que en los años de sequía, que son muy comunes, la disponibilidad de agua de las presas se reduce considerablemente. Tradicionalmente las variaciones de las presas se han resuelto extrayendo más agua subterránea de los acuíferos del Zanjón, la Victoria-Mesa del Seri y los Bagotes). Más recientemente las limitaciones de la disponibilidad se resolvieron con la construcción del Acueducto Independencia.

El problema es que los acuíferos, como depósitos subterráneos de agua, cada vez están más sobreexplotados. 

No es remota la situación en que los pozos que surten de agua a la ciudad se sequen en mayo o junio; de hecho es común la situación de que tengan que cambiar de pozos porque unos se agotan. Los últimos estudios de la Conagua publicados el 17 de septiembre de 2020 nos dicen que la sobreexplotación del acuífero de la Mesa del Seri es de -47 por ciento, la del Zanjón es de -14 por ciento y la de la Costa es de -96 por ciento. 

Un problema es que la Conagua, supongo que por austeridad, ya no ha vuelto a hacer estos estudios del nivel en que se encuentran estos acuíferos.

Por otra parte, el agua del Acueducto Independencia, que actualmente aporta 30 Mm3, puede dejar de extraer agua cuando el nivel de la Presa El Novillo desciende a cierto nivel. En junio de 2021 el nivel de la presa se acercó peligrosamente a ese nivel. La crisis se resolvió porque llovió a finales de junio antes de llegar al nivel en que las bombas ya no pudieran succionar agua. En este año 2022, de acuerdo con los reportes de la Conagua del 20 de marzo, el almacenamiento de la presa El Novillo estaba en 30% cuando el año pasado en la misma fecha tenía 42 por ciento de almacenamiento. 

El riesgo de que Hermosillo se quede sin el agua del acueducto es mayor este año.

El derroche de agua

De acuerdo con la auditoría del desempeño que realizó el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización, en 2020 el organismo extrajo 138.9 Mm3 de agua. De esta agua, el organismo solo facturó 59.3 Mm3. Esto significa una eficiencia de solo 43 por ciento y que los restantes 79.6 Mm3 se pierden o no se cobran. Los estándares indican que el nivel aceptable de eficiencia debería ser de 80 por ciento o más.

Pero el problema no termina ahí, de los 59.3 Mm3 que se suministraron, solo 44.0 Mm3 fueron debidamente pagados por los usuarios y el volumen restante es agua que los usuarios no pagan y evitan los cortes con reconexiones irregulares. 

Esto significa que el organismo solo logra cobrar el 32 por ciento (una tercera parte) del agua que produce a costos muy altos y en un entorno de escasez del recurso.

De acuerdo con los indicadores publicados, en 2020 la dotación de agua por habitante fue de 411 litros por habitante por día, cuando hace una década era de menos de 300 litros. Lo que Hermosillo consume es el doble de lo que consumen los habitantes de Tijuana o de Monterrey.

Por todo lo anterior, urge reducir el consumo de agua de la ciudad a niveles menos depredadores y más sustentables. Esto se puede llevar a cabo con una planeación y gestión integral de las cuencas, evitando las pérdidas de agua, haciendo más eficiente la red, reduciendo las pérdidas domésticas y, sobre todo, pagando cumplidamente este servicio tan útil y necesario. ¿Paga usted puntualmente su cobro de agua? 


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